Leadville, Colorado. — Colorado se destaca en el mapa de las tasas de obesidad del país como un perfecto rectángulo verde rodeado de tonos más alarmantes de amarillo, naranja y rojo.
Pero después de una mirada más cercana, el peso de Colorado es el de dos estados: uno peligrosamente obeso y el otro saludable y en forma.
En este mapa, conviven por un lado los blancos no hispanos acomodados, en su mayoría bien educados, a muchos de los cuales les atrajo Colorado por sus trabajos tecnológicos bien remunerados y la oportunidad de una variada vida al aire libre. Ellos están en forma.
Sin embargo, en contraste, las tasas de obesidad en adultos entre las minorías son mucho más altas: 29.9% para las personas de raza negra (no hispanos) y 27.7% para los latinos (de todas las razas), mucho peor que la tasa del 21.6% para los blancos no hispanos. Si bien esas cifras son mejores que la tasa general de obesidad del país, que es del 39.8%, una gran parte de los residentes del estado todavía luchan por comer de manera saludable y tener estilos de vida activos.
“La gente escucha: ‘Oh, Colorado, el estado más saludable de la nación’”, dijo Wendy Peters Moschetti, directora de sistemas alimentarios de LiveWell Colorado, una organización estatal sin fines de lucro que promueve la alimentación saludable. “Pero cuando profundizas, surge la paradoja de Colorado. Colorado está importando salud”.
Pocos lugares ilustran ese contraste tan claramente como Leadville, una ciudad del condado de Lake de 2.759 habitantes, enclavada en las Rocky Mountains, conocida como el hogar de una ultramaratón homónima de 100 millas. Aunque el condado de Lake está cerca de los glamorosos centros turísticos de Vail y Breckenridge, Leadville y sus alrededores están llenos de parques de casas rodantes, hogar de los trabajadores que hacen que la economía del turismo funcione.
Muchos otros estados, condados y ciudades registran disparidades similares en las escalas de obesidad, alimentación saludable y ejercicio. Las estadísticas generales enmascaran los problemas subyacentes, lo que dificulta enfocar la atención y los recursos hacia los más necesitados.
“Mucha gente piensa que Leadville es realmente saludable. ¿Cómo puede Leadville tener un problema de obesidad?”, dijo Katie Baldassar, directora del proyecto Lake County Build a Generation del departamento de salud pública del condado. “Lo que realmente vemos en Colorado, y en Leadville, es un problema de equidad”.
Tiempo de pantalla vs tiempo de montaña
Aquí, los adultos van a trabajar a los centros de esquí, en las partes acomodadas de los pasos de montaña. “Limpian las habitaciones de hotel en Vail. Trabajan en la construcción en Breckenridge”, dijo Baldassar. “Y están experimentando el monstruo de dos cabezas: la escasez de alimentos y la obesidad”.
Sus hijos asisten a escuelas públicas, donde el 70% de los estudiantes son hispanos. A pesar de las oportunidades al aire libre que los rodean, casi el doble de estudiantes en el condado de Lake no cumplen con las pautas de actividad física como los de los condados cercanos más ricos de Summit y Eagle. Los niños obesos tienden a convertirse en adultos obesos.
Y así, a principios de julio, un grupo de niños de 8 y 9 años, conocido como Crew 5, del programa de verano Rockies Rock, caminó con esfuerzo por un sendero de montaña hacia Mosquito Gulch. Muchos de los niños nunca habían ido de excursión o de pesca antes de unirse al programa, y la mayoría habría pasado un verano más sedentario sin él.
“Probablemente viendo mi tableta o TV”, dijo Leonandro López, de 9 años, quien cantó con los otros niños durante la caminata. “No me gusta mover mi cuerpo”.
El programa está dirigido por Get Outdoors Leadville! que recibe fondos de la lotería estatal. La mayoría de las familias pagan la matrícula más baja, de acuerdo a una escala de salarios, entre $30 y $50 por una sesión de dos semanas.
A través del programa, los participantes obtienen comidas y refrigerios saludables, un beneficio clave en un condado donde el 67% de los niños califican para almuerzos gratuitos o a precio reducido durante el año escolar, y el 24% vive en hogares por debajo del umbral de pobreza.
El programa lleva a los niños al aire libre siete horas al día, cinco días a la semana, exponiéndolos a las mismas actividades recreativas que atraen a los turistas a Leadville.
“Esperamos que nuestros participantes se familiaricen con estos lugares locales”, dijo Cisco Tharp, director de Niños Saludables de Get Outdoors Leadville. “Y que puedan decirles a sus familias: “podemos venir aquí y podemos hacer esto’”.
Los niveles de obesidad del condado de Lake reflejan los del resto del estado, y los hispanos están peor que muchos de sus vecinos.
“Es una característica común de la forma en que observamos los niveles de obesidad en todo el país”, dijo John Auerbach, CEO de Trust for America’s Health, una organización sin fines de lucro que presenta un informe anual sobre la obesidad por estado. “Es más probable que la obesidad prevalezca entre aquellos con ingresos más bajos y entre ciertas poblaciones de color, en particular, afroamericanos, latinos e indios americanos”.
Eso es cierto en parte porque estas poblaciones pueden tener menos acceso a alimentos saludables, bebidas o espacios comunitarios seguros para la actividad física, dijo la doctora Ruth Petersen, quien dirige la división de Nutrición, Actividad Física y Obesidad de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC). En los vecindarios minoritarios se venden más alimentos y bebidas poco saludables, mientras que las frutas y verduras frescas a menudo ni se ven, o son más caras que en los vecindarios más ricos,en donde suelen abrir supermercados.
Los alimentos en Leadville cuestan un 18% más que el promedio nacional, según una evaluación reciente de alimentos de la comunidad, mientras que los ingresos en el condado de Lake languidecen muy por debajo del promedio estatal. La única tienda de comestibles en Leadville almacena botellas de oxígeno para los turistas que luchan con el aire, pero apenas tiene media góndola de productos frescos.
Acelga y parques infantiles
Los residentes del condado están tratando de hacer que la comida saludable y el ejercicio sean más accesibles.
El Centro de Conservación de Cloud City está cultivando vegetales en una huerta local, un desafío significativo dada la elevación de 10,000 pies y la corta temporada de crecimiento. La granja tiene un par de invernaderos, una cúpula geodésica y un túnel en forma de hangar, cubiertos con láminas de plástico.
Los agricultores cultivan plantas que proporcionan la mejor cosecha en el menor espacio, incluidas acelgas y lechugas, coles y guisantes. Eso significa que no hay tomates, aunque eso es lo que todos quieren.
“Las verduras que crecen mejor en este clima pueden ser menos populares, pero son las mejores para ti”, dijo Kendra Kurihara, directora ejecutiva de Cloud City.
Cloud City vende sus productos a través de un programa agrícola patrocinado por la comunidad que brinda a 30 familias una caja semanal de verduras frescas. Diez de los lugares se reservan para familias de bajos ingresos, que obtienen el doble del valor de los cupones de alimentos. Pero la demanda excede la oferta, con 45 familias atrapadas en una lista de espera.
Las escuelas también han renovado el recreo y los parques infantiles.
Hace solo seis años, los estudiantes de la Escuela Intermedia Lake County competirían para terminar su almuerzo lo más rápido posible, sabiendo que los primeros niños en la puerta tenían la mejor oportunidad de obtener uno de los ocho columpios, el único jueg en buen estado en el patio de la escuela.
Un grupo de padres se unió, con la esperanza de recaudar $1,000 para comprar pelotas y cuerdas para saltar. Con la ayuda de la fundación y la recaudación de fondos privados, terminaron con un rediseño de un patio de juegos de $500,000. Cuando los diseñadores les preguntaron a los niños qué querían, los niños pidieron más columpios.
“Eso fue todo lo que conocían”, dijo Baldassar. “No podían imaginar otra cosa”.
El patio de juegos que construyeron cuenta con telarañas gigantes para escalar, toboganes construidos para la velocidad, colchonetas para equilibrar, y sí, columpios. Fue un punto de inflexión para el distrito escolar, dijo, que ha pagado dividendos con puntajes más altos en las pruebas y un mejor rendimiento académico.
Aún así, Joan Brucha, gerente de la unidad de Alimentación Saludable y Vida Activa en el Departamento de Salud Pública y Medio Ambiente de Colorado, dijo que el financiamiento para el trabajo de prevención de la obesidad en Colorado asciende a alrededor de 27 centavos por residente estatal. “No se pueden hacer cambios significativos en ese nivel”, dijo.
Según los CDC, Estados Unidos gasta 31 centavos por persona en esfuerzos de prevención de la obesidad. Los funcionarios de los CDC dicen que destinan recursos limitados a áreas donde las tasas de obesidad son más altas.
Y eso hace que sea mucho más difícil para Colorado presentar su caso. La financiación del impuesto estatal sobre el tabaco también está disponible para contrarrestar la obesidad, pero no es suficiente para marcar la diferencia en el condado de Lake o en el resto del estado.
En 2011, el gobernador demócrata John Hickenlooper estableció el objetivo de reducir las tasas de obesidad en un 10% para 2020. A solo unos meses de la fecha límite, el estado no está cerca de lograrlo.