Ahora que está cambiando la forma en la cual uno escucha música, cocina, compra, se entera de las noticias y revisa el clima, la voz amigable de tu asistente virtual Alexa, de Amazon, se está preparando para abrir el camino en todo lo relacionado con la atención médica.
Amazon tiene grandes ambiciones para sus dispositivos. Piensan que el asistente virtual Alexa podría ayudar a los médicos a diagnosticar enfermedades mentales, autismo, contusiones, y la enfermedad de Parkinson. Hasta esperan que Alexa pueda detectar cuando uno está sufriendo un ataque cardíaco.
Actualmente, Alexa puede realizar algunas tareas relacionadas con el cuidado de la salud: “Ella” puede rastrear los niveles de glucosa en sangre, describir síntomas, acceder a instrucciones de atención posquirúrgica, monitorear las entregas de recetas médicas a domicilio y hacer citas el mismo día en el centro de atención de urgencia más cercano.
Amazon se ha asociado con numerosas compañías de atención médica, incluyendo varias en California, para permitir que los clientes y empleados usen Alexa para ayudarlos con la atención médica. Los empleados de Cigna Corp. pueden administrar sus objetivos para mejorar su salud y ganar incentivos de bienestar con Alexa. Y Alexa ayuda a las personas que usan el monitor de presión arterial de Omron Healthcare, HeartGuide, a monitorear sus mediciones.
Pero muchas nuevas oportunidades están surgiendo desde que Alexa obtuvo permiso para usar los registros de salud de pacientes protegidos bajo la ley de privacidad de los EE.UU., conocida como la ‘Ley de Responsabilidad y Transferibilidad de Seguros Médicos’ (HIPAA, por sus siglas en inglés).
Anteriormente, Alexa estaba limitada a proporcionar respuestas genéricas sobre afecciones médicas. Ahora que puede transmitir información privada del paciente, Amazon ha expandido su “Kit de Habilidades”, herramientas de desarrollo de software, para agregarle funciones a Alexa. Pronto, el asistente virtual podrá enviar y recibir registros de pacientes. Esto permitirá que las compañías de atención médica creen servicios que sus clientes podrán utilizar desde su propio hogar.
Los esfuerzos de Amazon en esta área son importantes porque, con sus 100 millones de dispositivos inteligentes a nivel internacional, podría cambiar radicalmente la forma en que los consumidores obtienen información de salud e incluso tratamiento, y no estaría limitado a los consumidores que son expertos en tecnología. Los analistas esperan que el 55% de los hogares estadounidenses tengan dispositivos inteligentes para 2022.
Algunas de las nuevas habilidades de Alexa son una novedad para estos dispositivos: escuchan cada sonido a su alrededor. Esto es necesario ya que están preparados para responder a cualquier solicitud, como “Alexa, ¿cuántas cucharadas en media taza?” O “Agrega zanahorias a la lista de compras”.
Recientemente, investigadores de la Universidad de Washington publicaron un estudio en el que le enseñaron a Alexa, y a otros dos dispositivos -un iPhone 5s y un Samsung Galaxy S4- a estar atentos a la respiración agónica, el distintivo sonido de jadeo que es una advertencia temprana en aproximadamente la mitad de los paros cardíacos. Estos dispositivos identificaron correctamente la respiración agónica en el 97% de los casos, mientras que registraron un falso positivo solo el 0.2% de las veces.
Investigaciones previas habían demostrado que una máquina podía reconocer un paro cardíaco durante las llamadas de emergencia al 911 de manera más precisa y mucho más rápida que los operadores humanos.
Amazon, que no quiso hacer comentarios para este artículo, tiene una patente sobre una tecnología acústica que puede reconocer y actuar durante las interrupciones de audio significativas. En combinación con la tecnología patentada de la Universidad de Washington, que diferencia la tos y los estornudos de otros sonidos de fondo, Alexa, por ejemplo, podría discernir cuando alguien está enfermo, y sugerir soluciones.
Debido a que Amazon también posee patentes sobre el monitoreo del flujo sanguíneo y la frecuencia cardíaca a través de una cámara habilitada para Alexa, su aplicación de inteligencia artificial podría enviar los signos vitales al consultorio de un médico antes de que el paciente llegue a su cita y puede continuar monitoreando su condición después de que regrese a su casa.
“Abre las posibilidades de brindar atención médica a distancia”, señaló el doctor Sandhya Pruthi, investigador principal de varios ensayos de prevención del cáncer de seno en la Clínica Mayo, y que ha estado en la primera línea del uso de asistentes de voz para la atención médica. “Piensa en las personas que viven en pueblos pequeños que no siempre tienen acceso a médicos y quieren saber si necesitan recibir atención médica. ¿Podría ser esta una oportunidad, si alguien tiene síntomas, para decir: `Es hora de que vea un médico’?, se preguntó.
Un número creciente de clínicas, hospitales, proveedores de atención médica a domicilio y aseguradoras han comenzado a experimentar con productos que usan Alexa:
- Livongo, una compañía startup con sede en Mountain View, California, enfocada en el manejo de enfermedades crónicas, vende un monitor de glucosa que se conecta a Alexa para ayudar a los pacientes con diabetes a rastrear su condición.
- El proveedor de atención médica domiciliaria ‘Libertana Home Health’, con sede en Sherman Oaks, California, creó una aplicación para Alexa que permite a los residentes mayores o en estado delicado comunicarse con sus cuidadores, crear notificaciones para los medicamentos, medir su peso y presión arterial, además de programar citas.
- El Centro Médico Cedars-Sinai en Los Ángeles colocó dispositivos de Amazon con un complemento llamado Aiva en más de 100 habitaciones para conectar a los pacientes con el personal y proporcionar controles de televisión de manos libres. A diferencia de un botón de llamada estático, el dispositivo controlado por voz también puede avisar a las enfermeras si un paciente requiere ayuda y puede decirle al paciente el estado de su solicitud.
- Boston Children’s Hospital, que ofreció el primer software de atención médica creado para Alexa, con una herramienta educativa llamada ‘Kids MD’, ahora usa la inteligencia artificial de Amazon para compartir datos de recuperación posquirúrgica entre la casa del paciente y el hospital.
Muchas compañías de tecnología médica están tentadas por las posibilidades que ofrece Alexa y tecnologías similares para una población que envejece. Un dispositivo portátil podría transmitir información sobre caídas o si la persona no está caminando bien. Alexa podría combatir la soledad. Está aprendiendo cómo conversar.
“Alexa puede combinar una interacción práctica en torno a la atención médica con una interacción que puede involucrar al paciente, incluso entretenerlo”, dijo Laurie Orlov, defensora del cuidado de adultos mayores.
Alexa y otros asistentes de voz también podrían ayudar a brindar un poco de alivio a los médicos y otros profesionales de la medicina que se quejan de que ingresar datos médicos en los registros lleva demasiado tiempo y resta interacciones importantes con los pacientes.
Esta tecnología podría funcionar en segundo plano para tomar apuntes durante las citas entre médico y paciente, incluso sugiriendo posibles tratamientos. Varias empresas nuevas están trabajando en este tipo de aplicación.
Una de esas empresas es Suki, con sede en Redwood City, California, cuya publicidad es “Alexa para médicos”. Su software de inteligencia artificial escucha las interacciones entre médicos y pacientes para anotar la información automáticamente.
Los dispositivos de Amazon necesitarán sobresalir en la inteligencia artificial conversacional, tendrán que ser capaz de relacionar una frase anterior con una posterior, si es que quieren seguir siendo dominante en los hogares.
En una entrevista de 2018, en el blog corporativo de Amazon, Rohit Prasad, vicepresidente de la compañía y científico principal de Amazon Alexa, explicó la evolución anticipada de Alexa utilizando el “aprendizaje federado” que permite que los algoritmos se vuelvan más inteligentes al incorporar aportes de una amplia variedad de fuentes.
“Con estos avances, veremos que Alexa se volverá más consciente del contexto en la forma en que reconoce, comprende, y responde a las solicitudes de los usuarios”, concluyó Prasad.
Esta KHN se publicó primero en California Healthline, un servicio de la California Health Care Foundation.