Funcionarios estatales y agencias federales están alertando sobre una nueva estafa telefónica: personas que llaman haciéndose pasar por rastreadores de contactos de COVID-19 e intentan obtener información de la tarjeta de crédito o de la cuenta bancaria de víctimas desprevenidas.
Al parecer, los estafadores se están aprovechando de una auténtica intervención de salud pública que es crucial para detener la propagación del nuevo coronavirus: el rastreo de contactos.
En uno de esos fraudes, que se detalla en una advertencia del fiscal general de Montana, los estafadores les dicen a sus víctimas: “Llamo del departamento de salud local para informarles que ha estado en contacto con alguien que tiene COVID-19”. Luego piden información sobre la tarjeta de crédito “antes de continuar”.
No te dejes engañar. Los rastreadores de contactos legítimos no solicitan pagos ni buscan otra información financiera, advierten defensores de los consumidores y funcionarios.
“No es para nada parte del proceso”, dijo Crystal Watson, investigadora principal del Johns Hopkins Center for Health Security. “Nadie debería dar información bancaria o de su tarjeta de crédito”.
Los rastreadores de contactos reales generalmente trabajan para los departamentos de salud. Se ponen en contacto con pacientes que dieron positivo para COVID para preguntarles por sus síntomas y ayudarlos a aislarse hasta que están libres de virus, y a determinar qué amigos, vecinos, colegas o conocidos podrían haber estado cerca en los días anteriores o posteriores a la prueba del coronavirus.
Entonces, los rastreadores buscan a esos contactos en una carrera contrarreloj, con la esperanza de que esas personas también sean puestas en cuarentena.
Esta herramienta de salud pública de eficacia probada y verdadera (junto con lavarse las manos, usar una máscara en público y mantener una distancia física de 6 pies entre personas fuera del hogar) es una de las pocas estrategias disponibles para frenar la propagación del virus mientras los científicos investigan potenciales tratamientos y vacunas.
El rastreo de contactos legítimo se está realizando ampliamente en algunas áreas, como el Distrito de Columbia y Hawaii, y se le ha atribuido el mérito de ayudar a países como Nueva Zelanda y Taiwán a contener el virus.
Pero con este éxito también vienen los aprovechadores. La Comisión Federal de Comercio (FTC), el Departamento de Justicia y el Departamento de Salud y Servicios Humanos, así como el Better Business Bureau, fuerzas del orden público y funcionarios de salud de todo el país, han emitido alertas al consumidor sobre personas sin escrúpulos que no están afiliadas a los departamentos de salud y que usan el teléfono. llamadas, mensajes de texto o correos electrónicos para obtener información personal de sus víctimas.
¿Qué diferencia a una llamada real de una falsa? Por un lado, las llamadas de rastreo legítimas pueden ir precedidas de un mensaje de texto, notificando a los pacientes de una próxima llamada del departamento de salud.
Luego, en esa llamada inicial, el rastreador legítimo busca confirmar una dirección y fecha de nacimiento, especialmente si eres un paciente COVID positivo, dijo Watson.
“Preguntan sobre tu identidad para asegurarse de que eres la persona con la que están tratando de comunicarse para no revelar información potencialmente privada a la persona equivocada”, agregó.
Los rastreadores también pueden ayudar a las personas que deben aislarse o ponerse en cuarentena a conectarlas con recursos, como la entrega de alimentos o medicamentos.
“Algunos incluso pueden proporcionarle un lugar fuera del hogar para ponerse en cuarentena de manera segura” si, por ejemplo, vive en una casa multigeneracional sin la posibilidad de tener un dormitorio o baño separados, dijo Watson.
Al final de la llamada, el rastreador puede preguntarle si pueden llamarlo o enviarle un mensaje de texto en los próximos días para verificar cómo van progresando los síntomas.
¿A qué debes estar atento?
Preocúpate si recibes un mensaje de texto inicial que te pide que hagas clic en un enlace, que podría ser spam y descargar software en tu teléfono, advirtió la FTC en mayo.
“A diferencia de un mensaje de texto legítimo de un departamento de salud, que solo quiere avisarte que te llamarán, este mensaje incluye un enlace para hacer clic”, dijo la agencia.
Otra alerta roja clara: si te piden tu número de seguro social. Los rastreadores de contactos en la mayoría de las regions no preguntan eso, ni tampoco tu situación migratoria o financiera.
Además, ten cuidado si se proporciona algún nombre de pacientes con COVID.
“Un rastreador de contactos autorizado no revelará la identidad de la persona que dio positivo”, dijo la oficina del fiscal general de Wisconsin en un comunicado advirtiendo a los consumidores sobre las estafas. Otro consejo: investiga un poco antes de responder.
“Cada vez que alguien llama para pedir información, debes preocuparte por quién es”, dijo el doctor Georges Benjamin, director ejecutivo de la Asociación Estadounidense de Salud Pública. “Si son legítimos, puede decir ‘Dígame su nombre y número de teléfono’ y siempre podrá devolverles la llamada” después de comprobarlo.
¿El identificador de llamadas indicó que la llamada era de un departamento de salud? Algunos estados incluyen esa información. Por ejemplo, las llamadas de Virginia son del “Equipo VDH COVID”.
“Los estafadores prefieren aprovecharse de las personas que pueden ser más confiadas, que están solas o que pueden responder por confusión o miedo”, dijo el secretario del áarea de Aging de Pennsylvania, Robert Torres, en un comunicado de prensa del 12 de agosto. “Es importante que se mantengan alerta sobre cualquier contacto de cualquier persona que se identifique como rastreador de contactos y no proporcionen información personal hasta que estén seguros que la persona es legítima”.
Y, finalmente, si crees que un estafador se ha puesto en contacto contigo (por teléfono, correo electrónico o mensaje de texto), infórmalo a las agencias, como la oficina del fiscal general de tu estado.
“Si ves algo, di algo”, dijo el fiscal general de California, Xavier Becerra, en una alerta reciente para consumidores que emitió su oficina. “Estamos trabajando para rastrear a estos impostores”.