Cada vez más personas consideran que fumar marihuana es inofensivo o incluso beneficioso, pero nuevas y extensas investigaciones sugieren que las mujeres que están embarazadas o amamantando deben evitarlo por completo.
Estas son las nuevas recomendaciones de la Academia Americana de Pediatría, que cita creciente evidencia del daño potencial de la marihuana para el desarrollo a largo plazo de los niños.
Esta fuerte directiva para mujeres y pediatras se lanza cuando más de la mitad de los estados, incluida California, han legalizado la marihuana para uso médico o recreativo, y estudios muestran que un número creciente de bebés están expuestos a esta droga.
El proceso de legalización de la marihuana ha avanzado más rápido que la investigación científica sobre sus efectos. Debido a que la marihuana es una droga de la Lista 1, por definición, una con potencial de abuso y sin uso médico aprobado, la ley federal ha limitado la investigación al respecto. Pero en una revisión detallada de datos de seguridad existentes publicados en la revista Pediatrics, investigadores concluyeron que hay preocupaciones suficientes sobre el crecimiento a corto plazo y consecuencias neurológicas a largo plazo para los niños para recomendar que la madre no la consuma.
“Definitivamente, se debe aconsejar a las mujeres que no es una buena idea usar marihuana durante el embarazo. Si está amamantando, la alentamos a reducir el consumo o abandonarlo”, dijo Seth Ammerman, coautor del informe y profesor de pediatría de Universidad de Stanford.
Sin embargo, si una madre que está amamantando no deja de consumir, “los beneficios de la lactancia superan la posible exposición al bebé”, agregó.
Otro estudio, también publicado en Pediatrics, encontró que el THC, la molécula que le da a la marihuana la mayoría de sus efectos psicoactivos, se acumula en la leche materna, incluso hasta seis días después que la madre haya fumado.
Los hallazgos se producen a medida que aumenta el consumo de marihuana entre las embarazadas. De 2002 a 2014, el uso auto informado de marihuana en el último mes de gestación se elevó a 3.85%, un aumento del 62%. Desde entonces, un número creciente de estados ha legalizado la marihuana para uso recreativo, por lo que es probable que haya un subregistro de las tasas actuales. En estudios de mujeres embarazadas urbanas, jóvenes y en desventaja socioeconómica, del 15% al 28% de las mujeres informaron haber usado la droga.
California legalizó el uso de la marihuana recreativa entre adultos mayores de 21 años a partir de enero de 2018.
A diferencia del alcohol y los cigarrillos, incluso la marihuana vendida legalmente puede no llevar una advertencia de seguridad para las mujeres embarazadas, dependiendo del estado. California y Colorado requieren advertencias de seguridad.
“Existe un mito de que es algo benigno. Y para muchos adultos que son usuarios esporádicos, eso es probablemente cierto. Pero en estas circunstancias, puede ser perjudicial”, enfatizó Ammerman.
Y agregó que una preocupación particular es que la potencia del THC en la marihuana se ha más que cuadruplicado desde 1983. Varios de los estudios más grandes se realizaron cuando la potencia era mucho menor, según el informe.
La investigación ha descubierto que el THC puede atravesar fácilmente la placenta y acumularse en el cerebro y la grasa del feto en crecimiento. Los estudios, aunque limitados, sugieren que la exposición prenatal a la marihuana podría dañar el funcionamiento de los niños, incluida la concentración, la atención, el control de los impulsos y la resolución de problemas.
No obstante, en las redes sociales hay muchos grupos de mujeres que pregonan los beneficios de la marihuana durante el embarazo, citando la droga como un remedio para las náuseas matutinas.
“Muchas mujeres pueden obtener información de internet y de los dispensarios de marihuana. Como profesionales de salud, tenemos que educarlas sobre las muchas preocupaciones que existen tanto para el feto como para su posterior desarrollo”, dijo Kelly Young-Wolff, científico de la División de Investigación de Kaiser Permanente Northern California, quien no participó en los estudios publicados en Pediatrics. (Kaiser Health News no está relacionada con Kaiser Permanente).
Por ejemplo, un estudio reciente en la revista Obstetrics and Gynecology encontró que el 70% de los dispensarios de cannabis en Colorado recomendaban marihuana para tratar las náuseas matutinas durante el primer trimestre del embarazo. No hay evidencia que sugiera que el consumo de marihuana sea seguro o esté indicado para las náuseas matutinas, dijo Young-Wolff, aunque hay muchas otras opciones que un médico puede recomendar. Y la peor náusea ocurre en el primer trimestre, cuando el feto en desarrollo podría ser más vulnerable a sustancias como la marihuana.
Pero convencer a las mujeres de los peligros del consumo de cannabis durante el embarazo puede ser un desafío. “Gran parte del público iguala la legalización con algún tipo de respaldo a la seguridad. Por supuesto, eso no es cierto “, dijo Dana Gossett, profesora de obstetricia y ginecología en la Universidad de California-San Francisco.
Cuando aconseja a las pacientes que eviten la marihuana, dijo Gossett, se encuentra con una “cantidad grande de indiferencia”.
El embarazo suele ser un momento en el que las mujeres son receptivas a cambiar sus hábitos para proteger a su bebé en crecimiento. Pero, aunque generalmente aceptan que fumar cigarrillos es malo -algo claro desde la década de los 60- a menudo ven la marihuana como segura y natural, y por lo tanto inofensiva.
“El hecho que sea una planta o sea natural no lo hace seguro”. El arsénico, agregó Gossett, también es una sustancia natural.
Hasta ahora, la noticia sobre los peligros de la marihuana durante el embarazo y la lactancia no parece estar llegando al público que la necesita.
En Facebook, el grupo “Stoner Moms” tiene más de 22,000 seguidores. Y la aplicación de embarazo Glow Nurture tiene varios grupos comunitarios dedicados a los usuarios, que incluyen “420 Friendly”, “Ganja Mommies”, y “Stoners”.
Los grupos de charlas están llenos de mujeres que no preguntan si la marihuana podría ser dañina, sino que si fumar marihuana podría ponerlas en riesgo de que las contacten los Servicios de Protección Infantil.
“Vivo en Georgia… Solo tengo 5 semanas [de embarazo], pero planeo seguir fumando porque no hay evidencia que sea dañino. ¿Alguien ha dado a luz aquí sin que le hicieran una prueba?”, preguntó una usuaria del grupo “Moms for Marijuana” en la popular aplicación BabyCenter.
“Me pregunto si las madres que fuman cigarrillos tienen que pasar por las mismas preocupaciones que las madres que fuman marihuana”, preguntó una usuaria de Carolina del Norte. “Dejé de fumar a las 24 semanas y apesta que tengamos que vivir con el temor de que nos lleven a nuestros bebés”. ¡Aunque no hay evidencia de que la hierba sea dañina!
Las normas de detección varían según el hospital, pero 24 estados y el Distrito de Columbia exigen que los profesionales de salud informen el uso presunto de drogas durante el embarazo, según el Instituto Guttmacher. En muchos estados, el uso de drogas puede usarse como evidencia de negligencia o abuso infantil en una causa civil.
Según Young-Wolff, aunque se debe educar a las mujeres sobre los riesgos de la marihuana durante el embarazo y el período de lactancia, “ninguna de estas investigaciones debe usarse para castigarlas o estigmatizarlas”.
La cobertura de KHN de estos temas cuenta con el apoyo de Heising-Simons Foundation, The David and Lucile Packard Foundation y Blue Shield of California Foundation.