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¿Por qué sigue siendo tan difícil encontrar vacunas contra covid para niños pequeños?

¿Por qué sigue siendo tan difícil encontrar vacunas contra covid para niños pequeños?

Jennifer Phillips, asistente médica de Intergalactic Pediatrics en Seattle, espera que llegue un envío de vacunas contra covid-19 para niños el 29 de septiembre. (Annabel Clark for The Washington Post via Getty Images)

El 12 de septiembre, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) recomendaron la siguiente ronda de vacunas contra covid para todas las personas, desde los 6 meses en adelante. Estas dosis iban a estar disponibles en unos días en farmacias y consultorios médicos de todo el país, dijeron los CDC.

Pero más de un mes después, las versiones pediátricas de las nuevas vacunas contra covid, para niños de 6 meses a 11 años, siguen siendo difíciles de encontrar.

Una combinación de problemas —desde tecnicismos sobre quién puede vacunar a los niños pequeños hasta la falta de información correcta en internet sobre los sitios de vacunación— sigue impidiendo que los padres se aseguren de que sus hijos estén protegidos.

“Nadie tiene información precisa sobre dónde realmente están las dosis. Es simplemente un desastre logístico absoluto tratar de encontrar información y me estaba volviendo loca”, dijo Anne Hamilton, una residente de Los Ángeles, que buscó durante semanas una dosis pediátrica para su hijo Jimmy de 4 años.

Hamilton consultó primero con el sistema de salud de su hijo. El sitio de internet ofrecía citas de vacunación solo para adultos.

En el sitio web, “la ventana que aparece dice ‘se esperan nuevas vacunas para finales de septiembre, inténtelo de nuevo más tarde’. Es frustrante leer ese mensaje cuando estamos en octubre y no te dan ninguna otra información”, dijo.

Un problema que ha causado dolores de cabeza a los padres ha sido intentar encontrar dosis cubiertas por sus aseguradoras. Por primera vez desde el inicio de la pandemia, el gobierno federal no paga directamente a los fabricantes por las dosis de covid, un proceso que permitió a médicos y farmacéuticos recibir envíos de forma gratuita.

Ahora, las farmacias y los médicos tienen que pagar por adelantado las dosis a los proveedores para almacenarlas. Y las familias necesitan usar su seguro médico para pagarles a los proveedores, y eso puede ser complicado.

Después de días de buscar en internet y muchas pistas falsas, Hamilton finalmente encontró una farmacia a más de una hora de distancia, en Palmdale, con dosis pediátricas. Llamó para asegurarse de que realmente tuvieran vacunas, y que también aceptaran Medi-Cal, el seguro de su hijo. Después hicieron el viaje de una hora. Pero cuando llegaron, los farmacéuticos dijeron que no podían aplicarle la vacuna a Jimmy porque tenía menos de 18 años. Hamilton llamó a Medi-Cal para aclarar.

“El representante en la línea de Medi-Cal nos explicó que debíamos realizar el proceso a través del programa de Vacunas para Niños”, dijo. “No sabía qué era este programa”.

Según el programa de Vacunas para Niños del gobierno federal, el hijo de Hamilton solo podía recibir la vacuna de un proveedor participante.

“Nadie publicó la información de que los niños con Medi-Cal debían vacunarse a través del programa de Vacunas para Niños”, dijo Hamilton.

“Nadie tiene información sobre cómo encontrar una clínica cercana porque la mitad ni siquiera figuran en el sitio myturn.gov”, dijo, refiriéndose a un sitio web de citas para vacunas administrado por el estado de California.

Hamilton fue dirigida a un sitio web diferente, también estatal, que se suponía mostraría la ubicación de los proveedores de vacunas para niños en todo el estado.

“El sitio web simplemente no funciona”, dijo Hamilton después de tratar de navegarlo.

Frustrada, envió un correo electrónico al Departamento de Salud Pública de California (CDPH), que le dijo que sabían que el sitio web no funcionaba y que “los técnicos estaban trabajando en ello”. Nadie del CDPH se ofreció a ayudarla ni a indicarle la lista de proveedores que necesitaba, dijo Hamilton.

Después de que KFF Health News y NPR le preguntaran al CDPH por qué el mapa habilitado por Google de Vaccines for Children no funcionaba, arreglaron el sitio web. Sin embargo, muestra solo los proveedores participantes y no indica si esos médicos y farmacias tienen vacunas pediátricas contra covid. Los padres deben llamar a los proveedores individualmente para ver si están aceptando pacientes o constatar con el sitio web federal vacunas.gov.

Hamilton quedó frustrada y llorando.

“Conozco padres de todo el país que están buscando dosis. Es una búsqueda para todos en este momento”, dijo.

En Estados Unidos hay dos sistemas de vacunas paralelos, y el que usan los niños depende de su seguro. Los que tienen seguro médico comercial reciben vacunas a través del mercado comercial. Pero los que tienen seguros del gobierno, como Medi-Cal, reciben vacunas a través del programa Vacunas para Niños, financiado con fondos federales. Solo los proveedores participantes, como el pediatra del condado de Orange, Eric Ball, pueden administrarles la vacuna.

En el marco del programa Vacunas para Niños, “en realidad hacemos un pedido, las vacunas nos llegan, el gobierno ya las ha pagado y luego las distribuimos a los pacientes que tienen esos seguros, de forma gratuita”, explica Ball.

Para los niños cubiertos por planes comerciales, los proveedores de atención médica deben comprar la cantidad que creen que necesitarán con anticipación. Pero Ball dijo que muchos pediatras no almacenan ni administran la vacuna contra covid a esos niños porque no pueden solventarlo.

A photo of two children smiling for the camera showcasing bandages on their arms after getting vaccinated.
Katie Hamilton, de 11 años, y su hermano Jimmy Hamilton, de 4, en una clínica temporal de vacunas dirigida por el Departamento de Salud Pública del condado de Los Ángeles en el Parque Eugene A. Obregon, el 12 de octubre de 2023.(Anne Hamilton)

“Muchos consultorios pediátricos somos pequeñas empresas, y esto significa que tenemos que gastar mucho dinero por adelantado para poder comprar estas vacunas y luego esperar semanas o meses para recuperarlo”, dijo.

Si los padres buscan vacunas en una farmacia, pueden enfrentar otro obstáculo: las regulaciones que restringen los tipos de proveedores que pueden administrar vacunas a los niños. Los farmacéuticos pueden vacunar a niños de 3 años o más según una ley federal temporal. Eso deja fuera a los niños de entre 6 meses y 3 años, que tienen que consultar a un médico.

“En nuestra oficina, tenemos una lista muy larga de familias que están esperando el día en que lleguen nuestras vacunas contra covid para finalmente poder empezar a vacunar. Ha habido mucha frustración”, dijo Ball.

La oficina de Ball participa en ambos sistemas de vacunas pediátricas. A través de Vacunas para Niños, su práctica recibió algunas dosis pediátricas, pero solo puede administrarlas a pacientes que califican.

Esperó un mes por un envío de solo 100 dosis de la vacuna pediátrica contra covid para sus pacientes con seguro comercial. No es suficiente para satisfacer la demanda.

“Es una pena porque hemos perdido muchas oportunidades desde que se aprobó esta vacuna hace más de un mes”, dijo.

“Hemos tenido muchos pacientes que vienen y quieren vacunar a sus hijos, especialmente niños pequeños y bebés que no tienen la protección de las vacunas anteriores”.

St. John’s Community Health es una clínica de una red de seguridad financiada con fondos federales con varios sitios en todo el condado de Los Ángeles. La red atiende a niños y familias de bajos ingresos, y para sus vacunas pediátricas la clínica depende del programa Vacunas para Niños.

Pero Jim Mangia, su presidente, dijo que para la nueva vacuna pediátrica contra covid se están recortando los pedidos y no están recibiendo las dosis que solicitaron.

“Pedimos 3,000 la semana pasada; recibimos 500”, dijo.

Pero Mangia dijo que St. John’s brinda atención a 50,000 niños. Debido al déficit, no anuncian la vacuna contra covid ni envían correos electrónicos o mensajes de texto para correr la voz, como suele hacer el personal.

“Básicamente estamos esperando”, agregó. “Si alguien la pide, le proporcionamos la vacuna, pero no estamos haciendo el nivel de alcance que normalmente hacemos para vacunar a la gente porque todavía no tenemos suficiente suministro”.

El programa Vacunas para Niños está a cargo de los CDC. En una visita reciente a Los Ángeles, la directora de los CDC, Mandy Cohen, dijo que no tenía conocimiento de ningún problema con el suministro o el pedido de vacunas contra covid.

“No hay límite de pedidos. Estamos escuchando que se están recibiendo los envíos en tres o cuatro semanas”, dijo. “Diré, personalmente, que el pediatra de mi hijo tiene la vacuna y ha tenido una clínica de vacunación contra covid, por lo que la vacuna está disponible”.

Jimmy, el hijo de Anne Hamilton, finalmente recibió la vacuna a través de una clínica temporal administrada por el condado de Los Ángeles. Se siente afortunada de haberla encontrado.

“Le dije a una de mis amigas que iba a vacunar a mis hijos y me dijo: ‘¿Encontraste una vacuna pediátrica? No puedo creerlo’”.

A Ball le preocupa lo que significará la lenta implementación para los bebés y niños pequeños vulnerables, que son demasiado pequeños para haber sido vacunados antes y deben recibir varias inyecciones antes del aumento previsto de covid en invierno.

“Si queremos vacunar a estos niños para el Día de Acción de Gracias y las vacaciones de invierno, es fundamental que comencemos a hacerlo ahora porque no es una situación única. Necesitamos que estos bebés reciban múltiples dosis durante varias semanas antes de que puedan estar adecuadamente protegidos”, dijo.

Mientras tanto, los niños siguen infectándose. Uno de los pacientes de 4 años de Ball dio positivo el mismo día que su consultorio finalmente recibió 100 dosis de la vacuna pediátrica. La madre del niño había intentado vacunarlo antes, pero no pudo encontrar un proveedor que tuviera dosis.

“Como pediatra, lo único que me duele más que ver a un niño enfermarse o estar internado es que se enferme o deba ser internado por algo que yo podría haber evitado. Y si no tengo las herramientas para evitarlo, me duele y es muy triste”, dijo Ball.

Este artículo proviene de una asociación que incluye a LAist, NPR y KFF Health News.